14.12.12

algún día encontrarás un corazón a la altura de tu inocencia

No te quería encontrar, pero ahí estabas de pie, como galáxico, observando las almas pasar, con tu mente perdida como siempre, y como si leyeras mis pensamientos, volteaste hacia donde ella estaba parada, justo lo que nunca quise, pero antes de poner en marcha tu cerebro, reaccionando ante mis instintos, me perdí entre la audiencia, para no observar el trágico evento que me sospechaba, su nueva adquisición besándole la vida como devorándose a un animal, sediento, pidiéndole más.

Y entre tantos cigarros, peos y tragos, una vez más contradiciendo mis deseos, te acercaste, para desquitarte de ella, conmigo. Yo que nunca quise ser tu joyita, que me exhibieras en un público reactivo como juguete nuevo, te ignoré por el bien de la patria, para salvarnos la poca dignidad que nos dejaste después de una obra tan absurda como tú agarrando mi mano y yo creyéndome tu mirada (tan enamorada).
 
Te rechacé contra todos los impulsos de mi cuerpo, de mi historia de amor de adolescente retirada. Te miré como quien está cansado de tanto bochorno, de tanto trabajo de obrero construyendo un muro emocional para salvarme de lo que sorprendentemente harías luego, sonreirme y entender que ya no te quiero más para un rato, que te necesito para mi vida entera. Que ya no soy una niña jugando al lobo en el bosque, que no soy la caperucita buscando refugio.

Y sin embargo se me fue el mundo, porque esto es solo un deseo reprimido, que tú no estas conmigo, y yo ya no pido nada.

Te quedaste parado, alelado, siguiendo el paso de los transeúntes, evitando soportar la rabia de verla con su nuevo juguete, y de no verme a mí para cuando tengas hambre.

10.12.12

y mis manos te encontraban aún en la ausencia

...Pero nunca había sentido tanta tristeza, incluso cuando te acababas de ir.

He dejado un poco de mí en todos mis hombres, incluso en los desconocidos. Tengo la esperanza de que algún día, si me recuerdan, me recordaran bonito, con una sonrisa, con un suspiro. Al menos yo a todos los recuerdo, aunque me duelen profundamente, a cada uno los recuerdo.

Y todavía espero pacientemente mi utopía disparatada de amor, de las flores inundando el pasillo, los cuartos, la sala. Espero aún la serenata en mi ventana, la carta del amor prófugo de un desconocido, que alguien pierda un vuelo para poder quedarse conmigo. Quiero volver a sentir el fuego por dentro de cuando los conocí a cada uno de ellos, de esconder mi mirada porque qué pena, o de quedarme alelada observando sus labios cuando hablaban, perdiendo la razón del tiempo y el espacio, perdiendo mi corazón a retazos.

Me volteo tan sólo un poco, y están todos mis hombres, con sus mujeres, tan felices, tan sonrientes, tan completamente enamorados y atontados, siendo lo que nunca fueron conmigo, atentos, contentos, queridos.

Todas las noches me pregunto si esto será mi culpa, si nunca seré lo suficiente, si nunca seré capaz, si me quedaré encerrada en una vida que no quiero que sea la mía, que no quiero tener jamás. Me duele la vida entera pensar que quizás esto nunca ocurra, que quizás nunca me quieran como ellos las quieren, que nunca tendré quien me lleve el desayuno a la cama por sorpresa, que quizás nunca me regalarán flores sin motivo.

Que puede que nunca sea lo suficiente, no importa lo que haga, no seré opción, y ántes que ser conformista, sé que sola estaré mucho mejor.

10.11.12

será.


mis manos temblaban, y mi mirada se perdía, cuando por fin entendía lo que debía de hacer. 
es un dolor tan profundo, casi inhumano, y tengo la mente perdida, la voz apagada, no logro ni encontrar las palabras para explicar lo que sentía.

temía por mi vida, tenía miedo sobrenatural, y la nostalgia de haber vivido algo que sé que jamás volverá.

no puedo explicarles la rabia de que se alboroten los pensamientos, y saber que tengo un deber, que herirá sus sentimientos.

sé que no es tarde, pero mi corazón está roto en vano, mucho tiempo he esperado, y pocas cosas le he dicho, tengo el alma en un pantano, oscuro, frío y desterrado, porque me lo merezco.

sé que me lo merezco.

20.10.12

tumbaron al hombre, PERO NO A LA IDEA*


Lo primero que pensé el 07 de Octubre al saber que habíamos perdido, fue una imposibilidad de existencia demasiado arrecha. Es decir, sentí que me clavaron un puñal en el corazón y que todo era mentira, que la realidad que vivimos era simplemente una ilusión. No podía entender como estos 14 años de violación continua a la dignidad del venezolano, de muertes a diestra y siniestra sin importar la clase social o el color de piel, y el abuso por parte del Estado a quien no le jale bolas, triunfaran por 6 años más.

Es decir, el Gobierno en 6 años va a tener la edad que tengo yo ahorita.

20 años en el Gobierno.

20 años de inflación exacerbada, de muertes fijas, de secuestros, atracos, robos, maltratos, indiferencia por parte de los Órganos y Entes Públicos.

Y sentí que perdí el alma entera, que sin importar lo mucho que nos habíamos esforzado ese día, nada valdría de nuevo la pena. Se me partió el corazón en mil, y me vinieron todos esos personajes a la cabeza que el Gobierno me ha arrebatado. Personas que llegué, o no, a conocer, pero que si este Gobierno nunca hubiera llegado, ellos seguirían con nosotros. Desde aquellos que sus vidas fueron arrebatadas por el hampa, como aquellas que no pudieron sobrevivir por no encontrar las medicinas necesarias.

Pero entonces, después de estar contra el piso por un día y medio, después de sentir el peso de la realidad por completo, pensé que lo que más me había dolido no fue que ganara Chavez, sino que perdió Henrique Capriles. Que perdió aquel pseudo-Dios que nos devolvió a la vida, que nos regresó la esperanza y el querer tener un nuevo país. Y se me volvió a ir la mente y la vida cuando ví el 08 de Octubre como su biografía de Twitter de nuevo decía "Gobernador de Miranda".

Pero ya me levanté de nuevo, ya me sacudí la depresión más grande y arrecha que he tenido en mis 20 años de vida. Y es que cuando veo a mis primitos, a mis vecinitos jugar por ahí, o a los niños de primaria en los colegios, sigo queriendo más que nunca un nuevo país. Y un buen país.

No me quiero rendir, quiero luchar más que nunca, quiero salir de nuevo a la calle, quiero seguir trabajando en los centros de votación, quiero, con la Constitución en la mano, hacer respetar los preceptos y fundamentos con los que separaron a nuestro hermoso país del Reinado español.

No puedo fallarles a la generación de relevo, no quiero que piensen que nos rendimos. No quiero vivir en otros país y que cuando mis hijos me pregunten porque no estoy aquí, tener que decirles que fue porque me rendí, que fue porque no me importó abandonarlo todo.

Ellos vienen pronto, algunos incluso podrán votar en esas elecciones, pero si algo he de hacer, es por lo menos dejarles el camino listo, con mapa, linterna y carpa en el bolso, y una sonrisa y unas energías gigantes que ayuden a cambiar nuestro hoy por hoy.

Cuando oí a un niñito que acompañó a su papá a votar gritar HAY UN CAMINO! se me arrugó el corazón, y pensé: "por tí es que quiero luchar, por tí, por ustedes y por los que vienen". ¿Cómo podemos fallarles? ¿Cómo podemos regalarles este país a quienes no lo aman y no lo aprecian? ¿Cómo podemos dejar esa esperanza morir?

Otro niño que nos vio llegando de una de las manifestaciones por Karen Berendique nos dijo que no dejáramos que eso volviera a pasar, que siguiéramos luchando y siguiéramos manifestando.

¿cómo podemos dejar eso de lado a pesar de esta derrota? cuando recuerdo esas cosas siento que esta derrota fue mínima, fue una pendejada, nosotros ganamos más, nosotros ganamos una reputación, y vamos a ganar un país, no nos podemos rendir.

Ahora más que nunca hay que seguir el camino, y hay que traernos a nuestros panas de aquel lado para que se tripeen con nosotros el camino.




"Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera" - Pablo Neruda

6.10.12

Por Keynner Rojas

Nunca he sentido odio por una persona por tener un parche político distinto al mio, inclusive nunca he sido una persona que se dedique a implantar su idea en otras personas, pero he decidido hablar debido a que desde que puedo recordar, el País ha sido minado por pobreza, inflación, penas para los venezolanos que aman esta tierra.
Esto que trato de expresar es cansancio, cansancio por haber sido robado mas de 4 veces en los 2 últimos años, cansado de que el sueldo de mis familiares no de la talla para las necesidades acopladas a la realidad, estoy cansado de escuchar sobre muerte y hampa en la radio y la TV y mas aun, estoy cansado de que a mis futuros colegas periodistas o abogados se les rompa su titulo en la cara por profesar ideales de libertad de expresión o de aplicación adecuada de un mecanismo de justicia. 
La norma fundamental de nuestro País establece claramente en su articulo 57 la LIBERTAD DE EXPRESIÓN, la libertad de ideas y opinión, las cuales son atacadas repetidamente por este gobierno opresor. 
Estoy orgulloso de tener la esperanza de un nuevo camino, la esperanza de un futuro digno donde mis compañeros no escapen de nuestras fronteras por miedo a la miseria, a la violencia. 
Gane o pierda el candidato que apoyo, estoy orgulloso de lo que el pueblo venezolano ha demostrado en los últimos meses, el entusiasmo, euforia, la necesidad de una vía alternativa de todo este desastre de cárceles que rebosan y de magistradas que insultan por medio de las redes sociales, de personas que se hacen llamar "periodistas" sin siquiera tener el titulo de tal carrera tan fundamental para la sociedad. 
Por ello, sin atacar, sin obligar, les recuerdo la responsabilidad que tienen como venezolanos de salir a las urnas de votación este 7O, es hora de enmendar todo lo que se la quitado y ultrajado a nuestro País, por los mas jóvenes, por los profesionales, por los ricos y los pobres, por ti, y por mi, por Venezuela.
Keynner Rojas, orgullosamente venezolano.

2.9.12

Prohibido pisar el césped y la dignidad.


I


No sabía lo intenso que podía ser esto, a pesar de que me lo advirtieron sopotocientas veces, una vocesita dentro de mí lo gritaba a oscuras, y supongo que entonces, soy culpable de todos los cargos en mi contra.

Sé que estaba buscando una aventura, y que nunca había hecho algo más arriesgado que ir en un carro por Caracas a las 3 de la mañana, un poco ebria, con un pocotón de gente que acababa de conocer y unas amigas de Maracaibo, pero esto es mucho más fuerte de lo que yo esperaba, tengo miedo por mi vida, porque no me ha dejado de gustar esto, y por algún extraño motivo, sigo aquí.





II


Tengo muchos días ya cansada, del tráfico, de (no) estudiar, de pararme temprano (y llegar tarde), de vivir como si pudiera con todo. No sé como explicarme, algo así como un intento (en vano, creo) de demostrarle a todo el mundo, y a mí misma, que sí puedo con esta carga, y que soy una chica súperpoderosa, que puedo salir bien en la universidad, puedo tener novio, estar bien con mi familia y amigos, salir todos los fines de semana, incluso en la semana, y que la vida sigue… que aunque me rompan el corazón, la vida sigue.

Pensé que eran tonterías, pensé que sólo estaba en mi cabeza, que ése sentimiento de grandeza se debía a un ego muy grande, y a un talento innato de manipular persuadir a las personas de que yo no estoy mal, los demás sí.

Supongo que todo mi Yo tiene que ver con un poco de labia heredada, saber utilizar las palabras, o mejor dicho, saber acomodarlas en la frase. De vez en cuando me siento culpable cuando lo hago, porque sé que lo estoy haciendo para quedar bien con todos, incluso conmigo, pero ya está bueno ya de tanta guachafita, por eso decidí aventurarme, decidí que ya era suficiente de los cuentecitos y de vivir la vida cómodamente, sin pensar, sólo dejándome llevar. Sin embargo, lo que no me esperaba, era que me gustara tanto esto, de pana que lo hice un poquito de atrevida, y como dicen en Colombia… el riesgo era que me quisiera quedar… y me quiero quedar.






III


Entendí entonces que era hora de hacer las maletas, de besar la vida porque quién sabe qué, y que ahora, como están las cosas, mañana me pueden volar el coco con una metralleta.

El país no está para estar de risitas, la cosa está dura por allá en la calle, no se consigue la comida, la ropa, las medicinas. El presidente encadenado hablando paja, y una tensión inevitable por las próximas elecciones de octubre. Inundaciones por aquí y por allá. Cortes de luz a lo largo y ancho del país. No hay agua, no hay pan. No hay dinero, no hay divisas. Que si los pasajes de avión carísimos, no hay carros, no hay repuestos, no hay gallinas para cocinar, todas las gallinas se fueron a gobernar.

La vaina está tan arrecha que ni buenos hombres se consiguen, de esos que tienen un poco de la vieja escuela. Aquellos idealistas revolucionarios, con intenciones de cambiar el mundo, de vivir en paz, de vivir en amor y fraternidad y calma. Todos ahora andan con el toqueteo, la risita, y la moda, cambiaron el papel con las jevas, se la pasan viéndose en un espejo, que si la ropa, la vaina, la huevonada, y aja, bueno, yo se que yo me iría demasiado, pero ese es un iría que nunca se va, nunca se da. Por eso decidí que era hora de empacar, tomarme un red-bull, y arrancar, sólo que no sabía que no habría vuelta atrás.





IV


Me fui encontrando gente en el camino, de distintos tipos, distintas clases y colores, e intenté tomar lo mejor de cada una. Modestia aparte que usualmente tengo un buen ojo para seleccionar amigos, adquisiciones y culitos. Creo que tengo un talento innato para saber con quién juntarme y con quién no, y en qué momento, me tripeo tanto a los buenos como a los malos, pero estoy siempre pendiente.

En fin, el punto es que saqué lo mejor que pude de todos los grupos, que si de los sifrinitos caraqueños, y los alternativos pueblerinos, desde los malandros hasta los cerebritos, un poco de cada cosa, fui probando cada sabor, y me fui enamorando de mí misma a medida que iba pasando el tiempo. Ya les dije que tengo el ego inflado, ya irán viendo qué tanto.

Conocí muchas personas, de todos lados, desde la Caracas del Este del Este, hasta de Guayana y Bolívar, uno que otro comegato, algunos pavitos que tal, otros rock and roll que si Trash y The Clash. Pero usualmente los que más me gustaron fueron los letrados, los cultos, los que sabían la diferencia entre una Utopía y una Distopía, entre un Bernard Marx y un Helmholtz Watson.

Los que entendían que El Mundo de Sofía era una recopilación mínima de ciertas cosas básicas que debe saber el Ser Humano.

Aunque también me dí cuenta que muchas de esas personas son demasiado soberbias, como yo, que a veces pueden llegar a ser muy pedantes e insoportables, con la nariz pa’rriba creyéndose los Aristóteles de la era moderna, entonces de nuevo caí con aquellos que quizá no saben tanto, pero que tienen un corazón muy grande.

En otro tono de ideas, fui y vine como quise, pero nunca presentí que vendría este asunto, que estaría aquí sentada hoy para revelarles El Secreto, pero ya va, primero lo primero, no les puedo contar el final sin que sepan un poco del principio. Deben saber que nunca me imaginé lo grande que sería esto, y lo poco que sabía, y aún, lo poco que sé, pero que se me hace agua la boca de saber más, necesito saciar las ganas de conocer lo demás.






V


Vamos desde el principio, para entender el medio y el final. Todo comienza con que fui hija única, y nunca me parecí a los demás, todos eran muy iguales, mismas familias, todas conectadas, entrelazadas, divorciadas e infieles, todos y que súper católicos, súper mentirosos, y súper bonitos. Acaudalados, buenmozos e inteligentes (pero ojo, ser inteligente para la sociedad significa saber lo que la sociedad quiere que sepas, no lo que de verdad necesitas saber, eso te lo enseña la vida). Luego retomaré este punto, pero la situación radica en que no me parecía a nadie y tampoco quería hacerlo, así que busqué otros inconformes en la sociedad, otros Bernard Marx por así decirlo, y los fui encontrado, y me fui sintiendo mejor, me fui aceptando y queriendo más… Pero creo que eso de buscar a otros pares ya se los había comentado un poco más atrás.

Es que aja, al principio uno no sabe que es diferente, uno simplemente no se siente cómodo que si con el reggaetón, con el Cacique, con ir a rumbear que si a Roller, a Le Club, o a Stigma. Que si ponerse la faldita súper corta, y con las tetas al aire pero no tanto, que si Louis Vuitton, la Longchamp, el Chan Chan o el Pioggia, que si hacerme las lolas, ir a Magenta y a Miami… que si esto que si lo otro, que si el dinero, los viajes, la salidas, los novios, la moda, las drogas, los lentes, la ropa, los libros de moda, pero uno no entiende todavía qué es lo que está mal, si soy yo, o si serán los demás…

Y es que… ¿cómo podrían ser los demás, si de hecho… son más?, pero cuando al fin lo descubre, que no es uno, que sí son los otros, es como si te iluminara la Rosa de Guadalupe, la Virgen María, Allah, Buddah, o cualquier deidad en la que se crea, simplemente entiendes que hay otra vía, que no es una sola, que hay un camino distinto al que conociste desde siempre, que hay más opciones, y que no siempre el camino por el que va la mayoría, es el único, bueno y verdadero.

Hay momentos en que la mayoría se equivoca, sino pregúntenle al pueblo alemán con Hitler, al cubano con Fidel, o al venezolano con Chavez.





VI


He aprendido también que no hay una respuesta única o verdadera para las preguntas, siempre hay mil respuestas, que pueden ser mitad ciertas y mitad falsas, que puedes agarrar un poquito de todo, de lo que más te guste, y hacerlo, y que no todo ha sido ya inventado, pero lo que sí, puede llevarte a cosas infinitas, cosas maravillosas, si así lo quieres.

No siempre es bueno hacerse expectativas con respecto a algo, porque las cosas pueden ir peor que mal, o mejor que bien, pero sí es bueno hacerse un mapa mental, un planteamiento de hacia dónde se quiere ir, cuales son nuestros principios, y si no los tenemos, tenemos que ir buscando, no está mal copiarse de los principios de los demás, ni que tuvieran derechos de autor, lo que no está bien es quedarse siempre con los mismos principios… así forever. Las personas vamos cambiando, y por ende, si cambiamos el destino, tenemos que cambiar la ruta y la táctica. No tiene que ser un giro de 360 grados, o puede que sí, pero siempre teniendo un Norte, y establecer nuestro Sur, Oeste y Este.





VII


Me he ido enamorado de la vida, y a veces siento que tengo un corazón muy grande y no siempre veo reciprocidad en el asunto, incluso hay momentos en que estoy harta de las cosas, y quiero pegarle un tiro en la cabeza a todo el mundo, poner una bomba nuclear, e irme a la luna y activarla. Pero aja, todos tenemos nuestros malos días. El asunto es tomar lo bueno de esos malos días, aprender de ellos, y mejorar como seres humanos. Siempre, siempre siempre siempre, hay una salida para todo.





VIII


A veces pienso que sería más facil no saber de la vida, no saber de las cosas, estar pendiente de nada. Bien han dicho ántes que la ignorancia es el opio de los pueblos, y es totalmente cierto. La vida es más fácil cuando se vive sin vivir, pero es mucho más colorido con altibajos, conocer un poquito de cada cosa, saber que el mundo es mucho más inmenso de lo que creemos. Que la tierra no es una bolita de cristal, y que entre tantos Dioses, cuentos, colores, sabores, entre tantas historias y tragedias, sí hay un pequeño espacio reservado para nosotros en la humanidad. Que podemos aportar un pequeño granito de arena para que todos vivamos mejor.

Pero que sea mejor no quiere decir que sea más fácil, hay que hecharle muchas bolas, mucho sudor y lágrimas. Pero a que prefieren eso a que vivir incípidamente… Yo también, para eso estamos aquí.





IX


Supongo que sigo aquí, en este mood, con este state of mind, porque me gusta no ser igual a los demás, porque me gusta que me lo reconozcan, y que me lo digan.

Me gusta que cuando las personas hablan de un libro, de un hecho, de una noticia, yo sepa de qué están hablando, porque lo leí, lo oí o lo ví. Me gusta creer que aunque no soy la persona con la mente más abierta, porque al igual que todos, soy un ser humano con defectos que tiende a juzgar los defectos de los otros, todavía estoy en el camino para intentar aceptarlos.

Sé que no estoy cerca, que me falta mucho camino por recorrer, y todavía no sé como es estar allá, en la cima, pero dicen que es muy hermoso, y siento muy por dentro que es mejor de lo que cuentan, pero en realidad estoy disfrutando el camino, y si creo que voy muy rápido, busco un árbol y me siento, busco un libro y me pierdo.

De todas maneras no hay una hora determinada para llegar a la meta, y prefiero ir a mi propio paso, ya veremos como resulta esto, solo espero no perderme del ocaso.

Otra limonada.

No has regado las matas, y se me ha ido olvidando tu rostro.

Pensé que era mi culpa, por haberte dejado solo. Pensé que se solucionaría todo... Pero nada fue como yo esperaba, y me fui un tiempo para olvidar que tanto te amaba.

Pensé en escribirte muchas veces, pero me mordía los labios para olvidarme de que fuiste para mí la sonrisa más grande, la excusa inolvidable, la mariposa MÁS GIGANTE, que por mi estómago habría pasado.

No has regado las matas, y tus ojos se sienten muy lejanos, ya no recuerdo tus manos, y tampoco el color de tu pelo.

Yo sé que ya es muy tarde, y que ya no queda nada... pero quiero saber que ha sido de tí, si te decidiste con esa cosa por fin, si al fin eres feliz... Que ya no queda nada, pero lo recuerdo todo, no tus ojos, ni tu pelo, pero recuerdo lo que me hacías sentir. El miedo que contigo viví. Esa sensación de arriesgada, de no pensar en nada, tan sólo pensar en tí.

Y voy y me repito quinientas veces frente al espejo que ya es muy tarde para seguir con esta güevonada, que ya no queda nada, pero no quiero creer que fue así, que todo se terminó aquí.

No has regado las matas, y se me olvidó el sabor de tus labios, tus manos por mi cuerpo, tu sonrisa pícara de que estás adentro, y tu barba hermosa recostada encima de mi ombligo, tapándolo del frío, mientras me miras intensamente.

No has cortado el pasto, y la casa se ha ido inundando de tan malas cosas, de cosas que jamás pensé de tí. Mis memorias ya no recuerdan tu cara, no recuerdan tus dedos, no recuerdan tu ropa, y se han ido borrando los -te quiero-, que algún día sentí por tí.

Pasan los días y cada vez te siento más distante, primero pensé que tenías una amante, luego entendí que siempre fuiste así. Pasan los días y ya no me da miedo enfrentarte, decirte que qué coño te pasa, que si he perdido mi tiempo aquí.

Y es que tú lo eras todo para mí.

Sé que ya no es tiempo para rosas rojas, que ya no hay un nosotros, no hay un ahora, que todo lo que pensaba de tí, y de mí, fue mentira, no puedo hablar de que "había", porque no hubo y nunca habrá. Sé ahora que todas las cosas en las que creímos no fueron así, que estabas decidido en dejarme a mí por algo que ni te importa.

Ahora sé que no le diste importancia a la relación, a nuestra situación.

Pero lo que no me deja de dar vueltas por la cabeza es que nunca regaste las plantas, no cortaste el pasto, y jamás compraste la cerca.


27.8.12

Galáxico




Me encanta tu sonrisa, la piel en la que habitas.
Cada vello, cada poro de tu ser.

La forma en que tus manos se van reencontrando en mi espalda,
cada vez que me abrazas, cada vez que me callas.

O cuando tus dedos van subiendo por mis muslos,
y tus labios van explorando mis comisuras, mis inquietudes.

Me encantan tus suspiros, como de "ahhh, está loca",

Y te admiro, por cada silencio que guardas cuando armo mis berrinches,
cuando me absorvo en mis problemas olvidando que algo más existe,
que tú también te pones triste.

Amo tu piel rociada de rayitos de sol,
como si llovieran sobre tí partículas de ternura cada mañana,
como si de verdad esa luz te buscara.

Y esos labios parapeteados cuando te cuajas de la risa por mis malcriadeses,
y tu cara de miedo o pena cuando te obligo a conocer a mis padres...
Cuando te prometo no quererte más, y aunque sospeches la mentira,
no me lo dirás jamás.

Tus ojos y tu calma cuando duermes, la nueva maravilla del mundo.
Cuando entro en la cama y me acurruco en tu tranquilidad,
Promientiéndome que nunca de este lugar te irás.

O tus enfados descabellados cuando te hartas de mí y me regañas,
cuando ya no me soportas y te alarmas.

Y te ríes cuando lloro, supongo que por nerviosísmo,
Pero limpias mis lágrimas y sé que te duele,
Tu mirada me lo indica, que te entrieteces,
Y que si haces las cosas mal, vas y lo arreglas todo,
Sin quejarte, sin pelear, solo vas y me quieres más.

Admiro tu suspicacia, tu pericia y perspicacia.
Y que tu solo pasas, no haces ruido, no molestas,
como si fluyeras con el destino, como si todo en la vida tuviera al fin algún sentido.

Cuando te ríes, es como si el mundo flotara conmigo,
Como si estuviera viajando por la galaxia contigo.
Los colores son más brillantes, y nada de verdad importa mucho,
Eres tú y alegras mi ser, mi existir, no hay nadie en el mundo,
Sólo tú para mí.

Y voy sintiendo las mariposas en mis entrañas,
como cuando actué para tí como una extraña.
Cuando fuiste vocalista de la banda,
que yo cambiaba de nombre,
que tu quitabas la mirada.

Y todo tú, tus pequeñas mañas.
Un poco de whisky por la mañana,
Que si despegar de este mundo porque ya basta, y chao,
Pero no chao conmigo porque me quieres un poquito,
Pero chao con todos porque vas y vuelas alto.

Que te enamoras de lo que lees aunque sabes que no funciona,
Y aunque sabes que eres extremista, según yquemarxista,
vas y me das un beso,
porque te quiero.

Prometiste cuidarme, y lo has hecho,
Y sé que a veces no soy lo suficientemente atenta, pero lo intento.

Al principio tenía miedo, sí.
Justo de que esto pasara.
Pero cada día me importa menos, porque tú me gustas más.
Y que no puedo creer que estás aquí por fin, después de tanto esperar.

Estuviste a mi lado todo este tiempo, y lo siento,
lo siento por tardarme tanto en verlo,
pero al fin te tengo, y pronto ya todo estará,
ya lo verás.

2.8.12

goose

Salí corriendo como una ráfaga de viento, con la copa rota en las manos, y el libro en el cargamento.

Ya no tenía miedo, sabía de antemano que ahí acababa todo, lo había decidido en mi mente hace mucho tiempo, sólo que nadie estaba preparado, y no había luz en toda la zona. Con los pies todavía descalzos podía sentir las ramitas mojadas con la tierra húmeda, sentía piedritas, hojitas y cosas raras, pero no quería voltear hacia atrás, porque eso significaba regresar de nuevo al pasado.

Todo comenzó porque yo no tenía mi carro, pero quería ir mucho a este concierto, y resultó que todo se dió como esperaban, terminé con un montón de personas increíbles. Pero eso fue sólo la primera vez, porque todas las demás fueron una después de otra, sin parar, ya yo no sabía qué esperar.

Y poco a poco entendí lo que era todo, y entendí cuál era mi lugar finalmente, todo se fue desarrollando como siempre lo esperaba. El cielo, el ave, la playa. El casino, el puente, el vodka. Varios días, hasta que ¡CRAC! todo se desmoronó, hablé claro, pero nada funcionó.

Caí por siempre en el olvido, y decidí perderme por unos días.

Fue la mejor decisión que pude haber tomado, me sentí como nueva, y desde ese momento supe que no podía haber vuelta atrás, que ya era hora de crecer y avanzar. Me olvidé de todo y me tragué mi orgullo, me tragué las lágrimas y el cianuro.

Pero me agarraron muy temprano, y decidí terminar yo el libro, así que le robé lo que más preciaba, y ahora viene a buscar al niño.

28.7.12

Brave New World.

Solía ser una persona muy normal, fuera de lo habitual, pero dentro de eso, normal.

Muy informal, eso sí, con cara de despreocupación y de sensualidad, y suelen decir que siempre muy coqueta. Maliciosa, pícara, y coqueta. 

Tardé en entender esta faceta, quizá si me hubiese dado cuenta ántes, las cosas hubiesen sido distintas, pero todo se dio por sentado, y siempre sola, la felicidad tocó la puerta, alcanzando éxitos momentáneos, y satisfacciones usualmente banales, pero por fin entendí que debía estar en constante cambio, porque sino, no.

De Huxley pasé al Gran Hermano, y del Gran Hermano a Mr Mojo, pero cada día más miserable, y cada día más vacía. Quizá después de todo la ignorancia sí es felicidad pura en nuestras manos, pero hasta que no lo aprendemos, no lo sabemos y no la extrañamos.

Entendí por fin que nunca había entendido nada, aunque pensara lo contrario, y que por más que por fin tuviese la vaga ilusión de haber encontrado la respuesta, la pregunta más bien se había puesto más complicada. Y todo se echó a perder de nuevo. Todo lo que creía que conocía, se volvió a ir a la mierda.

Y no hay satisfacción más grande en el mundo que sentirse amado y querido, porque en teoría, es lo único que queda. Ya ni Winston ni Bernard me entendían, y aprendí a querer la soledad de El Príncipe. Llegué a entender su miseria, y a amarla sin más que con el trago amargo de estar sola en un camino correspondiente solo a mí.

Y sé que Olive y Sofía me entienden a veces como nadie, sé que esconderse en una gaveta de tu mente tiene sus beneficios, pero ya estoy tan cansada, y tengo mucho frío.

Entonces no sé qué es exactamente lo que pido, porque ya nada me llena, y me está pegando el vacío. Sé algo, creo, y es que huir siempre pospone mi dolor, pero nunca lo quita. Aunque intente abrir un nuevo capítulo, no soy yo quién decide cuando es que por fin se termina.

Tengo el corazón arrugado, roto y desteñido. He intentado encontrar alguien que me tiente, que me sorprenda, y que me intrigue, pero me he autosaboteado todos estos años. Como quien quiere la cosa pero se hace la loca, y cuando por fin la tiene, se asusta y la bota. Exactamente como si no quisiera ser feliz, como si después de tener el helado, lo soltara para que la gravedad lo aplastara al piso. Y ese piso pesa… me pesa mucho y cada día.

No basta con llenarme la cabeza de letras, de leyes, de vidas… solo para olvidarme que en algún punto se perdió la mía. E intento reinventarme y salvarme de un destino que parece inminente, pero nunca nada funciona, y ya el cielo está estrellado… como quien ya está listo para ser hermitaño, estar solo y por siempre aislado.

Quiero un cariño que va más allá de novios y extraño a alguien que nunca tuve como mía, pero tuve la ilusión de algo más o menos.

Sé que sueno inconsistente, pero no tengo prisa y el tiempo se me va de las manos, espero que todo esto no sea en vano, y que todos encontremos -eso- que tanto buscamos.

26.1.12

De los placeres y displaceres.

Para aquél que, saliendo de entre buques y navíos, se sentó conmigo en el lago frío, y me escuchó.

Tú, paraíso terrenal, descarado y criminal, obsceno, barbudo, Marco Polo, perplejo, esnób, rechoncho, moreno, ojos pardos, ambidiestro, parásito, ambiguo, desordenado, sabandija, esperpento, guayabo, profundo, asesino, filósofo, comunista, humanista, caballero, ladrón, autónomo, presidente, inservible, galán, latin lover, Pedro Navaja, Napoleón, Cristobal Colón; fuiste tú la fiel copia de la musa en mi memoria, de todos los altibajos de mi historia, y de mis Dioses del Olímpo.

Anoche soñé contigo, pero no estaba durmiendo, ni estaba pensando. Tan sólo estaba delirando, con los ojos entreabiertos, pero la luz soñolienta de mis miedos, se convirtió en una frangancia que ya me había tropezado, y con solo rozarme los - Quiero - recuerdo tus versos en mis labios, y escucho de mi boca en voz alta, "yo aquí ya había estado".

Enamorarme de la noche cuando está estrellada, trazando poemas con tu aroma en pleno olvido, recordando tu sombra cruzando el hombrillo de mi alma, susurrándole al viento, con una lágrima atorada, que me has dolido.

Muchas intrigas me disparas con tus labios, escupiéndome palabras que nunca había oído, dando excusas de que sí, la noche está estrellada, pero amor, hoy la noche es de luna llena, aunque no me importó nada, porque ya te habías ido.

Da igual, ya he pasado de nuevo junto al río, y qué sorpresa, te encuentro justo en mi ventana, creyendo, de nuevo, que eras mío, pero notando luego tu ausencia en la mañana. No entiendo por qué siempre vienes y vas, sé que a veces llegan otras con sabor a tí, pero la ausencia de tus palabras y el exceso de tus suspiros suponen deseos contrapuestos, deseos resentidos.

Te conocí hace muchas vidas, y hace más de siete te perdí, te he conocido en formato amante, formato amigo, formato enemigo, y formato desconocido, pero supongo que el que más prefiero es el que me susurra, me grita, me apasiona, me encanta y me desencanta, el que me mata y me desata.

Sí amor, vos sos un paraíso de persona, pero vos no sos mi querido.

Vos sos mi todo.



"Me has roto las noches en dos. Una mitad para olvidarte y la otra para intentar odiarte mientras me convenzo de que tus fraudulentos actos, son motivos de sobra para mandarte al límite que divide lo sano y lo que me mata por segundos."