28.8.14

La Venezuela que merece nuestra dignidad.


De todas las puñaladas que le han dado a nuestra Constitución Nacional y demás instituciones de la República, una de las que más me incomoda es el arrebato malcriado y arbitrario de la Investidura Parlamentaria de quien hoy sigue siendo diputada, para mí, y para los 235.259 venezolanos que votamos por ella.

Aparentemente, a la Administración Pública se le olvidaron los artículos 200 y 266 #3 de la Carta Magna, escrita por esta misma. También los del COPP donde, antes de allanar la Inmunidad de un parlamentario, debe realizarse un Antejuicio de Mérito.

En vista que la Administración Pública tiene memoria corta, le recuerdo que el Antejuicio de Mérito, según José Vicente Haro, es una autorización que pide la Fiscalía para enjuiciar a un alto funcionario. Después de un proceso breve, se presenta la solicitud de antejuicio, se notifica al diputado y se hace una audiencia pública y oral. Según el Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, es un trámite previo que se da para ver si hay razones, o no, para enjuiciar a funcionarios públicos. Este trámite -previo- todavía se está esperando.

Nico está asustado, de esto no tengo duda, y ataca a todo aquel quien represente un peligro para su régimen de marionetas, cocaína y corrupción. Desde el comienzo de las protestas en febrero, 3.269 venezolanos han sido detenidos hasta agosto de este año, entre ellos, 238 menores de edad, según cifras del Foro Penal Venezolano. Hoy en Venezuela, el hampa está desatada y uniformada, y el ciudadano, desprotegido.

Leopoldo López lleva preso desde el 18 de febrero de este año, perdiéndose los primeros pasos de su hijo, o poder besar a su esposa cada día, pero más que todo, Leopoldo ha sido coartado de su libertad de opinión y acción. Su voz quiere ser silenciada, pero el rugir de la libertad ya trascendió las puertas de Ramo Verde. Con él se encuentran Scarano y Ceballos, y los tantos otros presos políticos que hoy son los nuevos próceres de Venezuela.

Sin embargo este tema de los presos políticos no es nuevo, desde hace más de diez años se palpa el inmenso dolor de la familia Simonovis, donde Iván ha sido sentenciado a una muerte desgarradora, sin pruebas y sin juicio justo. El trato inhumano y degradante por parte de Nicolás y sus secuaces, que vienen desde la época de Hugo Rafael, traspasó los límites de un capricho a un asunto personal. Y sin importar el daño que han causado en su familia, el sufrimiento que llevan sus hijos cada día, este régimen rechaza alguna medida humanitaria para quien hoy no recuerda la luz del sol.

El cinismo del régimen es tan abismal, así como su miedo, que una joven de 20 años también se encuentra secuestrada en el SEBIN desde el 13 de mayo. Sairam Rivas, presidenta de Trabajo Social de la UCV, militante de Bandera Roja, luchadora y comunista, pero comunista de verdad verdad, hoy vive una justicia injusta cada vez que aplazan su juicio y tergiversan su historia.

…Como ella, son cientos los estudiantes que han sufrido violación de DDHH y que han sido pisoteados por este régimen que perdió el control de nuestro país, esto hace años se les fue de las manos.

Daniel Quintero, de 21 años de edad, estudiante de la URBE en Maracaibo, fue detenido por oficiales de la Guardia Nazional Bolivariana después de haber participado en manifestaciones en contra del gobierno el 21 de Febrero. Fue golpeado brutalmente, la GN amenazó con quemarlo vivo, y en efecto le causaron quemaduras en las piernas, entre otras lesiones en brazos y abdomen, hoy Amnistía Internacional lleva su caso.

Así mismo, el 19 de Febrero, Geraldine Moreno, estudiante de 23 años, participó en una manifestación en Valencia. Un oficial de la misma GN, presuntamente disparó una escopeta de balas de caucho en su cara desde una distancia de apenas 30 centímetros. Geraldine murió en el hospital tres días después.

Pero así como Geraldine, están los casos de Bassil Dacosta, Robert Redman, Genesis Carmona, Roberto Annese, y varias docenas de venezolanos que fueron asesinados en las manifestaciones, y todavía hoy, la justicia no ha sido capaz de dar respuesta a sus familias, y al resto de los venezolanos que nos duelen estos jóvenes como nuestros que son. Tampoco es que espero mucho del sistema policial y judicial de este país, si después de dos años que doce funcionarios del CICPC le apagaron la voz a Karen Berendique a balazos, su caso se mantiene impune.

Con todo esto quiero decir que, no es casualidad el arrebato ilegítimo de la Inmunidad de María Corina Machado. No es casualidad los presos políticos quienes hoy duermen en cárceles venezolanas. El desastre judicial que vivimos es intencional, los niveles de corrupción dentro de la Administración, la calidad de funcionarios policiales que hoy nos “protegen”, el proselitismo político dentro de las FFAA y demás instituciones que debiesen ser imparciales, todo esto es violación descarada y sin miedo a la legislación, sin embargo, es parte del plan maquiavélico de un régimen que intenta aplastar la voz, dignidad y libertad inherentes al pueblo venezolano.

Es una persecución política para todo el que adverse este régimen, bien sea líder nacional, o un estudiante universitario, la disidencia política está penada, no por la ley, pero sí por los jueces que hoy llevan la justicia como les place, y como les pagan. 

Como dijo Blanca Rosa Mármol de León en el lanzamiento del Congreso Ciudadano: “no tenemos Poder Judicial, todos estamos en lista de espera, solo esperamos que se antojen de alguno de nosotros” para que nos agarren, pero precisamente por eso estamos aquí, porque la violación de los derechos de un venezolano, es la violación de los derechos de todos, somos los mismos, en el mismo barco, buscando un futuro para todos. 

Si algo he aprendido es que los ideales son a prueba de balas, y sin importar cuán desesperadamente Nicolás y su combo pretendan ocultar la verdad, quieran secuestrar a la Justicia, e intenten oprimir a los venezolanos, la libertad y la democracia son valores irrenunciables de nuestra Nación desde el principio de los tiempos, y nada, ni nadie, hará que eso cambie.

Nunca duden que Nicolás es ilegítimo, porque no es venezolano y porque no ganó las elecciones, Daniel Ceballos y Enzo Scarano SON alcaldes de San Cristobal y San Diego, respectivamente, y María Corina Machado ES diputada, y es la diputada MÁS VOTADA de Venezuela. Y aunque Nico intente tapar la realidad con un dedo, o con un fusil, jamás podrá ocultar que le queda poquito tiempo, y que somos mayoría.